El revisor efectuará un control completo que incluya: comparación con el texto fuente, verificación de la ausencia de omisiones, de la equivalencia entre el texto meta y el texto fuente, mejoras estilísticas y de la homogeneidad del texto, respeto de la terminología y de los requisitos eventuales.
En efecto, la mayoría de los traductores no profesionales cuya lengua materna no es la lengua meta pueden dominar el idioma en los aspectos técnicos o específicos de su campo propio pero no siempre saben lo que se puede decir o no en una lengua que nos es la suya. El traductor no profesional tiende a minimizar el trabajo que queda por hacer. Desgraciadamente, con frecuencia, la revisión de un documento ya traducido por un tercero requiere tanto tiempo como su traducción por un traductor profesional.
Nosotros, en West Traductions, hacemos un análisis completo de cada proyecto de revisión a fin de orientarle hacia la prestación más adecuada.